NO HACER COSAS BUENAS QUE PAREZCAN MALAS, NI MALAS QUE PAREZCAN BUENAS: LA RELACIÓN AMLO-CHAPO GUZMÁN
Juan Osorio Flores
Lunes 30 de Marzo de 2020
Andrés Manuel López Obrador, el Presidente de México, saluda efusivamente y con sospechosa familiaridad a la señora María Consuelo Loera Pérez, quien es la madre de Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias, "El Chapo" Guzmán, preso en Los Estados Unidos.
El suceso registrado por todos los periódicos de circulación nacional en México, y ya con sus respectivas réplicas en la prensa del mundo, es una infranqueable crítica y más, al Presidente de México, a quien ya se le ve en el país y en el mundo, lo menos, como "gran amigo" de la familia del narcotraficante más conocido de México y por muchos años, considerado el "enemigo público número 1 en los Estados Unidos": Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Esta supuesta y desde luego no probada relación, tuvo un momento estelar el 17 de octubre de 2019 en Culiacán Sinaloa, en un operativo que terminó siendo un fracaso rotundo y que al final, nadie supo a ciencia cierta quién lo instruyó, pues el Presidente de la República culpó, como es su costumbre, a las Fuerzas Armadas, a la Policía Federal e incluso a la Fiscalía General de la República.
¿Cuál había sido el objetivo del operativo de aquél 17 de Octubre en Culiacán?. El joven Ovidio Guzmán, uno de los hijos del "Chapo".
De hecho, las fuerzas federales y armadas de México cumplieron, pues llegaron al domicilio en donde se encontraba Ovidio Guzmán y lo lograron sorprender y detener. El problema fue cuando a los pocos minutos toda la ciudad de Culiacán se vio cercada, incluso con ametralladoras y armas que solo se han visto en los conflictos bélicos de Oriente Medio, cercando jovencitos bien armados a los oficiales uniformados, quienes al final, por la instrucción confesa y abierta ante la prensa del mundo de parte de Andrés Manuel, tuvieron que rendirse y retirarse, se dice, aún con las disculpas pertinentes a quien habían molestado.
Aquél capítulo dejó muchas sospechas respecto al porqué Andrés Manuel dictó la instrucción de retirarse. Obvio, él, excelente manipulador de las masas poco o nada informadas ó con poco nivel de academia, rápido construyó un eje lema: "fue para impedir un baño de sangre", texto con el que se inundaron las redes sociales falsas creadas y manipuladas desde el Gobierno Federal y desde los Gobiernos Estatales afines. Aunque nunca se atrevieron jamás a explicar que si querían evitar un baño de sangre, ¿de quién entonces había sido la idea de enviar a detener el hijo de uno de los hombres más temidos, sin prever la reacción del temible cártel que finalmente apareció de la nada y en segundos colapsó a toda una ciudad?. A poco pensaron que cumplir con esa orden iba a ser un pan con mermelada?. Todo indica que sí. Sí lo pensaron, lo que indica que, al menos hasta esa fecha, el presidente de la República ni siquiera tenía idea dónde estaba parado.
Pero siguiendo el hilo de una relación, cualquiera que sea el nivel de la misma, con la familia del "Chapo" Guzmán, Andrés Manuel López Obrador viaja este fin de semana a "supervisar" los avances de una carretera que se construye de Badiraguato a Guadalupe Calvo, en el estado de Sinaloa.
Todo mundo sabe que Badiraguato es la cuna del "Chapo" y residencia "oficial" de parte de la familia, que en este momento encabeza la señora María Consuelo Loera Pérez, pero además es la zona identificada por las diversas corporaciones policiacas del país como "el triángulo dorado", territorio dominado al cien por ciento por el temible "Cártel de Sinaloa".
IMAGEN ESCANEADA DE LA SUPUESTA CARTA A LA QUE SE REFIEREN ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR Y LA SEÑORA MARÍA CONSUELO LOERA PÉREZ, MADRE DEL 'CHAPO' GUZMÁN
Y en medio de la supuesta supervisión, sin marcársele el alto ni mucho menos, avanza una camioneta ford lobo de modelo reciente color blanco en cuyo asiento del copiloto viaja la señora Consuelo Loera.
Andrés Manuel reconoce el vehículo, porque al verlo, desciende por una cuesta empedrada y con voz fuerte, no gritando, pero sí audible a varios metros, expresa: "Te saludo, No te bajes, No te bajes, ya Recibí tu Carta".
Para los seguidores de Andrés Manuel, ese hecho no significa nada.
Para los observadores y analistas de la vida política, no sólo en México sino en el mundo, sí: significó reverencia, respeto y sumisión de parte del Presidente, a la mamá del Joaquín "El Chapo" Guzmán, y esa posición, ante cualquier otra abuelita hubiera sido muy bien vista. Ante la señora Consuelo no. Sobre todo cuando sin ningún resquemor se oficializa por la misma Presidencia de la República, que "la carta a la que se refirió el Presidente, es una petición para intervenir ante el Gobierno de los Estados, en favor de que El Chapo Guzmán, regrese a cumplir su condena a una prisión de México".
La minimización del hecho en la mañanera del lunes, era cosa esperada: Andrés Manuel usando frases chocantes y ya bien impuestas en su léxico, desvía muy bien el tema.
Sin embargo, el daño está hecho, no solo en México, sino desde el extranjero, en donde se ve de pronto con gran recelo a Andrés Manuel López Obrador. ¿Porqué?. Bueno, la intervención ante el caso "Ovidio Guzmán", aunque no convenció a nadie, por fin lograron hacerlo olvidadizo. Pero ahora, con tanta familiaridad hablarse con la abuelita del mismo Ovidio?.
Cero y van dos. Igual y no significa nada. Pero, por eso, recomendaban las abuelas: nunca hagas cosas buenas que parezcan malas, ni malas que parezcan buenas...
