REMONTAR

Por Juan Osorio Flores

Todo había empezado bien para el PRI; muchos fallos, unos reales y otros perfectamente bien inventados por los enemigos al interior de los Gobiernos de Acción Nacional en el Distrito de Coatepec, auguraban que las tendencias populares se inclinarían sin problemas al tricolor y sus candidatos.

Pero los desaciertos en masa del priísmo local, así como la presencia de cuestionados e indeseables, aunado a las pugnas internas, patadas abajo de la mesa, pifias de los inexpertos y demás, pronto nivelaron las tendencias.
Luego, alcaldes panistas defienden a sangre y fuego su liderazgo que los llevó al cargo que ostentan, generando re-evoluciones entre sus militantes: Coatepec, Ixhuacán de los Reyes, Ayahualulco, Altotonga y San Andrés Tlanehuayocan, en donde de pronto el PAN comenzó a reposicionarse, obviamente en perjuicio del priísmo.

Hoy las condiciones políticas en el Distrito están, al menos visiblemente, divididas y extrañamente niveladas. Algo queda claro: la disputa por la Curul en San Lázaro solamente la pelean dos: el PRI cuyo candidato es Fernando Charleston Hernández y Everardo Soto Matla del PAN. El PRD no tiene ni representatividad, ni organización distrital y su presencia equivale a técnicamente nada.
Y la presunta ventaja de hace meses que holgaba a favor del PRI debido a los desaciertos del panismo en el Poder, hoy ya no existe. Al contrario: los viejos vicios del PRI ponen en peligro una contienda electoral que se antoja sabrosa.

Hace días hablé con un priísta "de hueso colorado" quien aceptaba mi señalamiento: los pequeños grupos que se reúnen los jueves, viernes y algún otro día en diversas casas de Coatepec, (100 o 120 asistentes son poquísimos para una población de 80 mil habitantes) así como en Xico por ejemplo, son atraidos por "los apoyos" que se les entregan, que pueden ir desde despensas, regalitos, artículos promocionales y demás, que los líderes tienen que quebrarse la cabeza para ver quién se los dona. Si no, no irían, ni con la consecutividad ni con el ánimo que lo hacen.
Por el contrario las asambleas de los miembros activos del PAN son diferentes: ahí no se regala nada, y los pocos que pudieran presentarse a las convocadas, lo hacen por el puro motivante político.

Ello puede ser la diferencia, pues ante la escasez financiera que se canta y canta por parte de funcionarios de todas las áreas del Gobierno del Estado, proveedor básico de los recursos del PRI, todo indica que para esta elección no habrá las maletas repletas de dinero, ni las cargas en trailer de toneladas de regalos que van desde las clásicas camisetas y gorras (compradas en China) hasta las pantallas planas, pasando por despensas, láminas, cemento, cobijas, chamarras, y más.
Mientras que en el PAN, en donde los miembros caminan con mucho menos inversión, las cosas se presentan más fáciles en ese sentido.

Así pues las condiciones políticas son complicadas; el tema de la violencia no queda fuera de esta elección, sobre todo en la zona del Cofre de Perote y en fin, los tumores políticos han ido creciendo conforme avanza el tiempo y a esta altura ya no faltan más que cinco meses de trabajo proselitista.
La realidad es que en este momento el grueso de la sociedad, esa que no milita, pertenece o simpatiza con algún Partido, no tiene ninguna tendencia ni a favor del PRI ni a favor del PAN. El ruido lo hacen los militantes de ambas fuerzas políticas, quienes, como debe ser, proclaman que tienen todo para vencer al otro.
Ahí es donde entrará la capacidad de los candidatos, quienes tendrán que salir a la calle a conquistar no a sus grupos juveniles, o grupos de mujeres, u organizaciones adheridas, sino a quienes normalmente les vale un soberano cacahuate la política y sus políticos, pues en ese sector es en donde está el porcentaje decisivo de votos.

NO SOY IMPARCIAL

Recibí hace días un correo defendiendo acciones y trabajos del regidor de Coatepec Fernando Ojeda; no lo publiqué porque el autor me reclamó textualmente: SEÑOR JUAN OSORIO YO LE PIDO DE LA MANERA MÁS ATENTA QUE AL RECIBIR MENSAJES QUE SÓLO DAÑAN A LAS PERSONAS, PORQUE NO ASISTE Y VERIFICA CON LOS AFECTADOS (EN ESTE CASO LOS EDILES) EL TIPO DE INFORMACIÓN QUE LE LLEGA, HAGA TRABAJO DE CAMPO, NO SÓLO SE QUEDE CON LA COMODIDAD DE ME LLEGÓ LA INFORMACIÓN Y YO LA SACÓ NO IMPORTANDO SI ES VERIDICA O NO;
Y es que como tampoco verifiqué lo dicho por él, el propio reclamante me exige que entonces no publique nada, lo cual atendí de forma puntual. Pero el detalle es que el mismo señor, quien me pide que tampoco publique sus datos, me reenvia el mismo correo, exigiéndome que ahora sí lo publique, bajo la advertencia de NO ME HAGA DUDAR DE SU IMPARCIALIDAD. Mire extimado lector, por sí, o por no, mejor dude de mi.... Saludos.

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