RAÚL ZARRABAL, ERES UN INÚTIL

Por Juan Osorio Flores

Me pesa repetir títulos a los artículos que escribo, pero a veces, no encuentro otros que encierren la realidad de lo que quiero expresar.

El pasado primero de septiembre, publiqué en este mismo espacio un artículo con el mismo título, en el contexto de un derrumbe más en la carretera Teocelo-Cosautlán.

Critiqué severamente el hecho de que anunciaran tantas más cuantas obras, así como la construcción de muchos, pero muchos metros de pavimento hidráulico en carreteras en donde no hace falta la inversión, por ejemplo, la carretera Coatepec-Xalapa vía Briones, en donde por regla circulan puros vehículos último modelo, preferentemente súper camionetas, y se dejara olvidado a los caminos en donde circulan puros pobres.

Hoy, los principales medios de comunicación señalan el socavamiento que existe en la carretera vía rápida Xalapa-Coatepec, y que ningún técnico de la Secretaría de Comunicaciones sabía que existía y sobre todo, que no esperaban que se hiciera presente en estas fechas, en que las obras de la SECOM han sido estrictamente de papel y saliva.

Y es que no contó que de forma recurrente, en dicha carretera siempre en cada periodo de lluvias se registran severos derrumbes, lo que en inicio, obligaría a un recorrido técnico por parte del departamento de Ingeniería de la SECOM en toda la extensión, que realmente no es tan extensa, pues apenas son 7 kilómetros, para realizar un levantamiento de cada punto que pudiera representar a priori, un riesgo, o en su defecto, que pudiera representar incidentes por causas naturales o de otro tipo.

Pero no. No se hizo ningún levantamiento y es hasta que los cerros se caigan o las carreteras se bloqueen, cuando aparecen las autoridades responsables, y que por cierto, aparecen para hacer anuncios tan espectaculares, que ni ellos mismos se las creen.

El trabajo, tan solo en la región, se acumula para la Secom: el enorme socavamiento que está en el kilómetro 16 de la carretera Teocelo-Cosautlán; los derrumbes que son interminables en el kilómetro 12 de la misma carretera; el eterno tramo que siempre requiere de bacheo, en la carretera Zimpizahua-Las Puentes; el socavamiento que denunciaron autoridades municipales de la administración anterior en Coatepec en el "Puente del Diablo"; las obras inconclusas de la carretera Limones-Piedra Parada-Cosautlán: el camino de acceso a la comunidad de Las Puentes, mismo que en su momento sirvió como alterno cuando el Puente se cayó, por un socavamiento que nadie había descubierto.

A lo anterior se sigue cuestionando de quién fue la idea de gastarse varios cientos de miles de pesos en tirar piedra recortada abajo del Puente del Río Sordo, cuando el dicho Puente ya no tiene arreglo, sino que indefectiblemente tiene que derribarse.

En suma, las condiciones de las carreteras de Veracruz y muy concretamente de la región de Coatepec, son muy graves, como no se había visto en años, y la Secretaría de Comunicaciones no hace nada, por una razón simple: no cuenta por una parte con una buena logística de puntos de riesgo y en segunda, pues porque no hay dinero en dicha dependencia para hacer nada.

Una tercera razón sería, porque simple y llanamente, el titular no tiene la más remota idea de qué es el trabajo como Secretario de Comunicaciones de un estado tan difícil geográficamente hablando, sobre todo en el rubro de carreteras.

Lo único que estoy esperando a esta hora, es que Raúl Zarrabal aparezca en los medios, dando entrevistas y asegurando que "se arreglará esta carretera en beneficio de todos los veracruzanos".

A eso se le llama una dependencia y a su titular, un ente inútil.

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